Bolivia no quiere no tener libertad de expresión en Internet

contacta     ·     sobre     ·     azar     ·     buchaca     ·     manifiestos    ·   

Imagen original de netzpolitik.org: Fight for your digital rights
La política se basa en la maestría en el discurso, lo que conocemos como diplomacia. En este ámbito, una doble negación no se entiende desde el silogismo de la afirmación, sino un ámbito intermedio y templado en el que no necesitamos aclarar nuestra posición. Por ello, Bolivia se merece mucha más claridad, así como una firme postura respecto a los derechos en Internet.
Estarás pensando, ¿por qué el artículo no se llama directamente «Bolivia quiere tener libertad de expresión en Internet»? Y es que no es tan fácil cuando nos vamos a las altas esferas políticas, y más específicamente las onusianas.

Resolución por la promoción, protección y disfrute de los derechos humanos en Internet

Hace una semana la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas ha publicado una resolución en defensa de “la promoción, la protección y el disfrute de los derechos humanos en internet”.

Lo primero que debemos entender es que una resolución es una serie de pedidos que se hace a los estados miembros para que se cumplan en pos de la defensa de los Derechos Humanos, y el Internet ya es considerado uno de ellos desde 2011. Además, y muy importante a tener en cuenta, es que una resolución no es vinculante. Esto quiere decir que la Comisión plantea esos pedidos a modo de recomendaciones pero no implica que los estados tengan que cumplir con ella obligatoriamente.

Aquí puedes leerla (de hecho te lo recomiendo para entender todo lo que está en juego):

Fuente: https://www.un.org

Llegados a este punto, y en donde se ha generado la mayor crítica, es por el hecho de que varios países no aparecen mencionados en la resolución. Este es un punto interesante a entender.
Las resoluciones son propuestas por una serie de países que promueven su aprobación. La suma de otros estados miembros implica un apoyo para que salgan adelante, pero la presencia o no en la resolución no implica la aceptación implícita. ¿Por qué? Porque al ser las resoluciones no vinculantes sirve con un proceso de consenso en el que se aplica una aprobación como constancia de esas recomendaciones que tendrán que seguir de ahora en adelante si quieren estar al día con la Comisión de Derechos Humanos.

Desde la dialéctica de la prensa

La noticia que más sarpullidos ha sacado a los políticos bolivianos ha sido la publicada por eldiario.es titulada: «Estos 17 países han votado en contra de la libertad de expresión en internet».

En ella se menciona:
«[…] Quizás el caso más sorprendente en este grupo sea el de Bolivia que, si bien defiende la libertad de expresión y no ha protagonizado escándalos relevantes de censura en internet, la pasada semana votó en contra de la resolución de la ONU.»

Existe aquí un juego retórico que es el que ha hecho que desde el estado boliviano hayan alzado la voz. Bolivia no votó en contra, directamente no votó, porque se decidió por consenso. Es decir, no existió en ningún caso tal votación. Y así se hicieron eco equívoco Los Tiempos y donde Página Siete pule un poco más los detalles.

Entonces, el artículo de @alvarohernandec en eldiario.es tal vez debería haberse titulado: «Estos 17 países no han apoyado una resolución a favor de la libertad de expresión en internet».

La reacción boliviana

El embajador de Bolivia ante la ONU, Sacha Llorenti, enseguida se apresuró a desmentir a eldiario.es con una afirmación compleja: «La resolución sobre protección y disfrute de los derechos humanos en el Internet se adoptó sin necesidad de voto.»

¿Por qué compleja? Porque la única respuesta posible es el título de esta entrada. No se afirma el apoyo a la propuesta de Resolución por la promoción, protección y disfrute de los derechos humanos en Internet, sino simplemente se aclara que la falsedad del enunciado reside en la inexistencia de tal votación.

Lo interesante de los medios digitales contemporáneos es que a veces nos permiten poder dialogar directamente con las personas involucradas. Así, a través de Twitter, estas fueron las respuestas que me pudo dar el Sr. Llorenti a mis dudas:

La pregunta más clave aquí para el propósito del texto es justamente: «¿Prevé entonces anunciar que se adhiere totalmente a los DD.HH. en Internet?». La respuesta, desde una diplomacia estoica, nos comunica más de lo que dice realmente. No es el apoyo a la resolución lo que está aquí en pugna sino el hecho de advertir sobre la falsedad de un enunciado periodístico ante la falta de veracidad en la existencia de una votación. Nos queda como consuelo que uno de los corazoncitos del último tweet pertenece al Sr. Llorenti por lo que podríamos hacernos una idea abstracta de que a lo mejor realmente le gusta la idea de defender los derechos de Internet en el país.

En la misma línea, si leemos el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores del Estado Plurinacional de Bolivia la condena viene, igualmente, al mal tino que tuvo el periodista con el titular y además, cae a colación un llamado a recordar a los medios de comunicación bolivianos que el periodismo ético está legalmente reñido con el sensacionalismo. De nuevo, se reafirma esta diplomacia en la que lo criticable es un sensacionalismo que consideran dañino (y obvio que lo es) para la soberanía de los pueblos, pero en ningún caso menciona o afirma tajantemente la postura de Bolivia al respecto de la Resolución del Consejo de Naciones Unidas, y más aún, cuál es realmente la diplomacia que se ha realizado en beneficio de las y los bolivianos.

Entre enmiendas anda el juego

Cuando se presenta una resolución ante la Comisión, todos los estados miembros están invitados a hacer enmiendas. Es decir, plantear modificaciones para que el documento final cambie respecto a lo que plantean. He aquí donde al parecer sí que Bolivia jugó un rol activo.

La web de activismo por la libertad de expresión article19.org publica un artículo (en inglés) donde explica qué pasó para darse el malentendido:

«Aunque la resolución fue adoptada por consenso, encaró la oposición de una minoría de estados.
La Federación Rusa y China encabezaron enmiendas a la resolución enfocadas a borrar los llamados a los estados para adoptar un «acercamiento basado en DDHH» para proveer y expandir un acceso a Internet» [1], y eliminar referencias clave a la Declaración Universal de Derechos Humanos y el lenguaje sobre libertad de expresión de la Convención Internacional de Derechos Civiles y Políticos [2]».

Tanto en la enmienda 1 como en la 2 Bolivia votó a su favor. Es decir, Bolivia no ha votado en contra de la resolución porque no hubo tal, pero ante la presentación de enmiendas de estas características sí se puso a favor.

Aquí una muestra de estas enmiendas:

Lamentablemente el apoyo que reciben estas enmiendas no quedan plasmadas en el documento por lo que nos apoyamos en la fuente creíble de article19.org, así como en la aclaración que Noticias Fides ha realizado a propósito de la acusación de la cancillería a medios bolivianos de violar el derecho y acceso a la libre información.

 

Un reclamo urgente

Esta resolución es, al momento de nacer, histórica. La creciente amenaza a las libertades en Internet requiere que actuemos para lograr tener herramientas efectivas de defensa de nuestros derechos. Como mencionan en la Red en Defensa de los Derechos Digitales:

«La resolución llama a los Estados a atender las preocupaciones sobre la seguridad en Internet en concordancia con sus obligaciones internacionales en derechos humanos, con el fin de garantizar la protección de la libertad de expresión, la libertad de asociación, la privacidad y otros derechos humanos en línea; a través de instituciones democráticas y transparentes basadas en la ley.

No es lo mismo que Bolivia
no quiera no tener libertad
de expresión en internet
aceptando el consenso de
una recomendación,
que Bolivia quiera libertad
de expresión en internet
haciendo pública su postura
.

Así mismo, la ONU condena inequívocamente todas las violaciones y abusos a los derechos humanos, tales como tortura, ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, expulsiones, intimidaciones y acoso, así como la violencia de género cometida contra personas que ejercen sus derechos humanos y libertades fundamentales en Internet. El organismo también condena las medidas para prevenir o interrumpir intencionalmente el acceso o la diseminación de la información en línea, en violación de las leyes internaciones de derechos humanos; pidiendo a los Estados que se abstengan y cesen esas medidas.»

El momento histórico en el que se encuentra Bolivia reclama que para la constitución de un proceso de cambio sostenible y libre en internet es necesario un posicionamiento firme de apoyo a la resolución en defensa de la promoción, la protección y el disfrute de los derechos humanos en internet.

Porque no es lo mismo que Bolivia no quiera no tener libertad de expresión en internet aceptando el consenso de una recomendación, a que Bolivia quiera libertad de expresión en internet haciendo pública su postura. Y así como Bolivia, el llamado debería ser generalizado a aquellos estados que sí la han apoyado, como España, donde la conocida como Ley Mordaza no casa en absoluto con esta resolución.

Pero atención, que no es cuestión de dejar en manos de los políticos que esto ocurra. Es clave la labor de presión de la sociedad civil en estos casos en los que solicita que sus estados apliquen y ratifiquen, al menos, estas resoluciones que son un inicio para sentirnos más libres.


Para la elaboración de esta nota se ha usado material recopilado y compartido por Javier Badani y se contó con el apoyo de Andrea Ixchíu y Lil Fredes.

Imagen original de netzpolitik.org: Fight for your digital rights

Hagamos de esto una conversación

2 comentarios en «<span class='p-name'>Bolivia no quiere no tener libertad de expresión en Internet</span>»

  1. es un bonito articulo y sobre todo yo quedo muy agradecido por la cantidad de informacion que pone a disposicion de los interesados, muuy bueno!…ahora mi comentario, con mi posicion…: me parece que cae en lo que supuestamente critica, el sensacionalismo, y me pregunto , porque?…bueno aca va:

    Sobre la preocupación por la enmiendas (en donde se juega entre lineas la cuestion), que más allá que demuestra una desconfianza ante lo expresado abiertamente por el representante boliviano – digamos con su corazon en twiter ante las preguntas-, si uno revisa la enmiendas aparece lo siguiente: copio y pego la declaracion, incorporando las enmiendas observadas con ***, para ver que incorporan o quitan:

    Paragrafo siete del preambulo:
    Observando que el ejercicio de los derechos humanos en Internet, en particular
    del derecho a la libertad de expresión*** y el de la privacidad***, es una cuestión que reviste cada vez más interés e
    importancia debido a que el rápido ritmo del desarrollo tecnológico permite a las personas de todo el mundo utilizar las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones,

    Paragrafo 1

    Afirma que los derechos de las personas también deben estar protegidos en
    Internet, en particular la libertad de expresión ***y el derecho a la privacidad***, que es aplicable sin consideración de fronteras y por cualquier procedimiento que se elija, de conformidad con el artículo ***17*** y 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos y del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos

    (que dice el articulo 17?: 1 Nadie será objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada, su familia, su domicilio o
    su correspondencia, ni de ataques ilegales a su honra y reputación.
    2. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra esas injerencias o esos ataques.)

    Paragrafo 15.
    Decide seguir examinando la promoción, la protección y el disfrute de los
    derechos humanos, incluido el derecho a la libertad de expresión*** y el derecho a la privacidad***, en Internet y en otras tecnologías de la información y las comunicaciones, así como la forma en que Internet puede ser una importante herramienta para fomentar la participación ciudadana y de la sociedad civil y para lograr el desarrollo en cada comunidad y el ejercicio de los derechos humanos, de conformidad con su programa de trabajo

    Bueno, esta claro cual es la posicion que defiende el Estado Boliviano si se trata d elas enmiendas «mañosas»: el derecho a la privacidad y la no injerencia…., y no es que no dice de frente su postura sobre la libertad de expresion (Bolivia se pliega a la resolucion- sin necesidad de votar, talvez por su obviedad- y ademas con un corazon de por medio, por no decir un guiño de «si, tu tranquilo»).

    La posicion soberana del Estado y su representante , considerando su adhesion a la enmiendas miradas de re-ojo, se refieren al derecho a la privacidad y la injerencia, suena raro?. Despues de que nos enteramos por la filtraciones de etcetcetc…que los Estados Unidos ESPIAN a todo usuario de internet ( si de ese cable que pasa por el oceano y llega a los propios Estado Unidos), aliados y no aliados, politicos y no politicos…no es mas bien razonable considerar esos aspectos- el derecho a la privacidad y la no injerencia- que en ultima instancia recalcan la defensa de los derechos humanos:DERECHO A LA PRIVACIDAD Y NO INJERENCIA,

    Claro talvez es mas facil desconfiar del «gobienro populista, autoritario y blablablabla que creer en la defensa de los derechos humanos de manera concreta y con soberania…es mas facil defender los derechos humanos de forma abstracta , tan abstracta que sirven de excusa hasta para hacer la guerra o meterse al pais «gobernado por dictadores».

    Me parece que el articulo cae en el sensacionalismo que dice criticar a los medios masivos.

    Y sobre lo que resalta el articulo y señalo: la desconfianza. La duda es sana, pero porque la desconfianza?, si todo esta claro, sin ambiguedades… el creer que por debajo no se ha dicho todo, que por detras hay una artimaña, que detras estan los rusos? los chinos?…o que?…no se….me hace recuerdo a la descripcion de los cronistas de los aborigenes de estas tierras, me hace recuerdo a la idea del indio como no digno de confianza, segun Arguedas, decian verdades a medias, no decian las cosas de frente… y bue, una vez que uno entiende el contexto del capitalismo actual… hay que ser dignos y soberanos hasta ante las naciones unidas, que no pocas veces dieron la venia para q se metan los poderosos donde no les incumbe…no fueron a defender la democracia a honduras, al paraguay, diciendo que no se respetaban los derechos humanos, el derecho a la propiedad?…y no son los Estados unidos los que espiaron a Dilma, a Merckel, no son los europeos quienes han decidido primero reglamentar el internet en sus paises, acaso no son ellos los primeros en tender su propia fibra por seguridad al espionaje?…pero claro, los populistas latiamericanos son dignos de mayor desconfiaza no?…hay que descolonirse un poco, y tranquilos , en Bolivia no hay el menor riesgo sobre la libertad de expresion, aca todos dicen lo que quieren y como quieren, solo vean lo que dicen algunos los periodicos sin mayor desparpajo, sin necesidad de fe de erratas ni aclaraciones…nada asi lo dejan…nos manipula, cierto, y hay qe preguntarse hasta donde, no sera que nos tocan la fibra mas intima de nuestro inconciente, no sera que estan juganod con el racismo que durante tantas decadas nos metieron en la cabeza?..

    Termino una vez mas agradeciendo el articulo porque invita al debate y la reflexion,y a buscar mas iinformacion. Gracias

    Responder
    • Primero de todo gracias a ti por la respuesta, el debate y la reflexión, que para eso dijimos que estamos.

      Intentando responder a todo:

      – El derecho a la privacidad y la no injerencia se juega en dos ámbitos. Si bien puedes entenderlo desde la privacidad del usuario, Rusia (quien propone la enmienda) tiene recorrido en la aplicación de privacidad en el entendido de no abrir las cuentas públicas del estado a través de lo denominado «Datos abiertos». Una demanda que si bien no es un DDHH también forma parte de muchos de los pedido actuales en el activismo de los derechos de Internet.

      – El tema de la injerencia es algo que particularmente debería preocuparnos ante el reconocimiento de instancias de derecho internacional en caso que el proyecto de regulación de redes sociales presentado siga su curso.

      Si te das cuenta, en el artículo no se pone en duda la soberanía del estado boliviano, sino todo lo contrario. Es más bien un llamado a que, efectivamente, Bolivia afirme su posición al respecto de la defensa de los DDHH en Internet. Porque obviamente se aprueba por consenso, como se explica, y pasa, pero no es lo mismo que decir: Sí, estamos totalmente de acuerdo. Para mí hay una gran diferencia.

      Respecto a la desconfianza del gobierno populista, la verdad, no es tal. Escribo esto desde Bolivia, donde estoy parado, lo que me hace tener más insumos de la realidad. Pero mi anclaje cultural con España es lo que hace que indudablemente haga otro llamado de atención a que de nada sirve estar presentes como estados que apoyan y luego sacan ignominiosas propuestas como la «ley mordaza». En ese sentido no creo que sea posible una lectura de crítica de un europeo a un país populista, todo lo contrario.

      En sí, si lo relees tal vez veas que más bien doy la razón a la explicación que da Bolivia sobre la mentira en el enunciado de la noticia. Es lo que más recalco en la nota. Pero intento hacer un llamado de atención sobre algo a lo que, desde la necesaria e indudable soberanía que debe tener Bolivia y defiendo, creo que es fundamental: una posición a la defensa de los derechos que debemos tener en Internet. De ahí, obviamente en tono de broma, que Llorenti no responda de manera certera diciendo «Si, Bolivia defiende los DDHH en Internet».

      Porque no ha habido un pliego a la resolución, no es cuestión de aceptarla por obvia. En política sabemos que hay una diferencia abismal entre posicionarte y dejarlo pasar por consenso.

      Sobre todo ello, y respecto al sensacionalismo que planteas en la lectura, lo pretendido es más bien esclarecer con pausa, investigación y meditación para que se entienda, qué es lo que ha pasado realmente, con una mención clara al final que depende también de todos nosotros, hacer que esos derechos se defiendan, que no todo es cuestión de esperar que el estado haga.

      Desde el interés por hacer más comprensible estas temáticas es que está escrito este artículo, y creo que además, exigir claridad a nuestros servidores públicos es algo que debemos hacer siempre.

      Gracias de nuevo por compartir tus impresiones Juan Luis. Espero haya servido un poco esto para clarificar tus puntos.

      Responder

Responder a danicotillas Cancelar la respuesta

blogroll

Licencia de producción de pares excepto en lo que no sea de mi puño y bit.